martes, 3 de diciembre de 2019

YA NO SOMOS DOS (2004): LA INFIDELIDAD ES UN HUMANISMO



Un film sobre la infidelidad  puede sonar a tema poco original. ¿Qué se puede decir sobre el tema que no se haya dicho ya? Pues lo que aporta este film es el intento de una visión honesta y cruda de la condición humana. Como dice Mark Ruffalo en los extras del DVD "No se puede juzgar tan duramente a los personajes porque son como nosotros, es parte de la condición humana el que en un momento dado seas infiel o cometas errores o no tengas claros tus sentimientos".







Aquí la historia va de una pareja formada por Mark Ruffalo y Laura Dern que tienen a otra pareja como mejores amigos...claro que Mark Ruffalo está acostándose con Naomi Watts, la mujer de la otra pareja mientras intenta sobrellevar el engaño en su casa con una esposa insatisfecha y dos niños pequeños. Por su parte el personaje de Naomi Watts tiene que aguantar a un marido al que cree no amar, porque es un egoísta total, mientras cría a una niña pequeña...conforme se vayan degradando las relaciones entre las dos parejas se darán cuenta de lo que realmente quieren...o no quieren...




Dirigida por John Curran (director asociado a un par de esas pelis que hundieron la carrera de Edward Norton) y producida por las propia Naomi Watts lo que tenemos aquí es un proyecto indie, el típico film que sale adelante porque Naomi Watts y Mark Rufallo se empeñaron en hacer porque les encantaba el guión y las historias en las que se basa el film (un par de historias sacadas de un libro sobre las relaciones de pareja). En su día el film pasó desapercibido porque en su paseo por festivales apenas ganó nada y los críticos tampoco es que derrocharan demasiados elogios, pero a día de hoy es un placer rescatar la película y disfrutar de unos actores enamorados de su oficio y de lo que cuentan y que intentan hacer un film tan honesto como fresco y que aporte algo a la humanidad.


 Naomi Watts, una razón para ver sin falta el film

No, aquió no hay efectos digitales ni el Universo está en peligro, ni siquiera sale Joe Pesci y Netflix, entonces, se dedicaba a alquilar películas por correo. Harvey Weinstein aún era respetado o temido y ni siquiera habían inventado a Hannah Montana! Y Woody Allen no tenía que huir de USA para rodar sus bodrios. Esto es cine de otra época, una película pequeña y olvidada con una guapísima Naomi Watts, un guapísimo Mark Ruffalo y una interesante historia que nada tiene que ver con lo que normalmente se hace en Hollywood....

Disfrutadla si no queréis vivir en pecado!





No hay comentarios:

Publicar un comentario