EL CASO ADELE HAENEL: CUANDO LOS DIRECTORES DE CINE SE SIENTEN ATRAÍDOS POR SUS ACTORES MENORES DE EDAD

 

La noticia no deja de ser inquietante y sórdida, una vez más, y es que la actriz Adele Haenel habló sobre cómo el director del film donde debuto con 12 años ("Les Diables" de 2002 era el film, un film de culto por cierto) estuvo acosándola desde los 12 a los 15 años. Ese director es Christophe Ruggia que aunque hace años que no filma nada lo poco que filmó estaba siempre dedicado a la infancia...pero obviamente este hombre ni está acusado judicialmente ni la policía lo busca...aún así ha sido expulsado de la Asociación de Cineastas de Francia. Entre los testimonios que han salido a la luz por una investigación periodística está la de la regidora del film Les Diables que dice que la relación entre la niña y el director era rara "como si fueran novios".

Adele Haenel y el director Christophe Ruggia en el estreno de Les Diables en 2002

 

 

Ahora Marion Cotillard aplaude en público el acto de valentía de Adele de contar la historia...y hundir la reputación del director de cine.

Adele Haenel en el film Les Diables (2002)

Lo curioso, pero de lo que nadie habla, es que Adele Haenel empezó una relación sentimental siendo menor de edad con otro director de cine, o mejor dicho directora de cine: Celine Sciamma, su actual pareja, que la dirigía en la que era la segunda película de la actriz y la primera de la directora. No deja de ser curioso el asunto y el dato. Sobre todo porque de nuevo tenemos a un cineasta que ha hecho pelis sobre niños (Tomboy iba de una niña que quiere ser niño, Naissance des pieuvres del despertar sexual y lésbico de una niña) y que se interesa por su actriz menor de edad. Pero sobre Celine Sciamma no hay sospechas. Que sus primeros films estuvieran dedicados a la sexualidad de las niñas y que se sintiera atraída por su actriz menor de edad no ha provocado ni el más mínimo comentario...

Celine Sciamma con 29 años dirigiendo a Adele Haenel de 17 años en el film Naissance des Pieuvres

Así que, como suele pasar, la realidad es compleja. La gente ya está opinando, y opina toda clase de cosas.