A PROPÓSITO DE LAS ACTRICES FEAS

Hoy cumple 38 años Gaby Hoffmann, una actriz de talento que sin embargo al ser más fea que el culo de un mono no obtuvo el estrellato que otros actores o pseudoactores consiguen por su cara bonita (Brad Pitt, Scarlett Johansson, Leonardo DiCaprio, etc). Estupenda actriz infantil que trabajó para Mel Gibson o Woody Allen (por cierto, Gaby de adulta se quejó del trato que le dio Mel Gibson en su estreno como director en el film "El Hombre Sin Rostro", por otro lado una de las obras maestras del cine de los 90's) y que podríamos comparar con otra fea mítica y compañera de generación como Heather Matarazzo (la inolvidable prota de Bienvenido a la Casa de Muñecas de Tood Solondz)

 Heather Matarazzo, otra fea mítica que nunca consiguió el estrellato

Gaby parecía destinada al estrellato cuando compartió protagonismo con Christina Ricci y Thora Birch en el film Amigas Para Siempre (1995) donde hacía de la versión adolescente de Demi Moore y sería la mejor amiga de Natalie Portman en Todos Dicen I Love You de Woody Allen.Pero fue crecer del todo, pasar de cisne a patito feo y ahí acabaron todas las promesas de ser estrella de cine. Cruel, injusto pero si hasta las guapas lo tienen difícil las feas ya ni hablemos. Sin embargo una Scarlett Johansson subía como la espuma al estrellato mientras a Gaby se la olvidaba en las cloacas del negocio.

 Gaby Hoffman en medio, junto a Natalie Portman en "Todos Dicen I Love You"

 

Después de una filmografía que incluía éxitos Solos Con Nuestro Tío (haciendo de hermana de Macaulay Culkin!), Algo para Recordar y Campo de Sueños (con la que ganó el premio a Mejor Actriz Joven del año en 1990), llegó el olvido, el cine indie y los telefilmes. Y cuando Hollywood parecía haberla olvidado participa en 8 episodios de la serie Girls (la serie por excelencia de las actrices feas) y empieza a ser nominada a los Emmys hasta en tres ocasiones. Bien, esta resurrección ha hecho que Gaby vaya a estar en lo que será el nuevo film de Joaquin Phoenix, no está mal como recompensa tras años de ninguneo.

Claro que cinéfilos como yo nunca la hemos olvidado, porque los cinéfilos como yo no nos movemos por modas o caras bonitas, sino por talento y encanto y Gaby siempre lo ha tenido. De haber sido guapa quién sabe hasta dónde podría haber llegado. A veces, así es nuestro asqueroso mundo, parecerse a Scarlett Johansson te abre muchas puertas. Gaby quizá nunca sea una estrella de Hollywood, lo que demostraría que el mundo está mal hecho.

 Gaby Hoffman, nunca podrá competir con Scarlett Johansson